Inma Salazar. Periódico Gente Burgos, viernes 24 de julio de 2020
Tras “muchos años de entrega total y absoluta a la ciudad, muy especialmente los últimos 16 como alcalde y vicealcalde”, Javier Lacalle, actual portavoz del grupo municipal del PP, dice adiós a la política local.”Es bueno que vaya habiendo un relevo y que otras personas vayan tomando responsabilidades; la casa queda perfectamente ordenada”, destaca. Pone fi n a una etapa “tremendamente gratificante y muy positiva” para centrarse en su labor como senador “trabajando por la ciudad y por la provincia, pero desde otro escenario como es el Parlamento de España”. Asegura que “a estar en la oposición también se aprende”, ya que es una situación que no había vivido antes, pues siempre había estado en responsabilidades de Gobierno.
De haberse conformado un equipo de Gobierno de centro derecha en el Ayuntamiento de Burgos en junio del pasado año liderado por Cs, Javier Lacalle admite que se hubiera ido al día siguiente, pero “pasó lo que pasó” -accedió a la Alcaldía el PSOE- y decidió continuar “un tiempo” para que el nuevo grupo municipal popular rodara. “Me parecía obligado, porque llegaba un equipo al grupo municipal popular que combinaba personas con experiencia en el Ayuntamiento con otras de nueva incorporación y había que ensamblar ese equipo y, sobre todo, ayudar a los nuevos concejales”, señala. Desde entonces, ha ejercido como portavoz del principal grupo de la oposición “con total y absoluta entrega”, afirma, y coincidiendo con el final del curso político ha tomado la decisión de abandonar el consistorio. “La única duda era si julio de este año o del próximo”.
¿Por qué este verano?
Entre este curso y el siguiente, lo que me ha llevado a tomar ya la decisión, después de darle una vuelta estas últimas semanas, era ver cómo está rodando el equipo; el equipo ha alcanzado ya velocidad de crucero, hay una integración perfecta entre los que tienen experiencia y los concejales que se han incorporado, están trabajando muy bien y he entendido que ya pueden volar solos después de todo este año.
¿Cómo cree que se tomará la ciudadanía esta decisión y, en particular, los votantes del PP?
Yo creo que como me están trasladando, con mucho cariño, porque todo el mundo sabe el tiempo que he estado trabajando, sacando adelante proyectos e iniciativas, y lo que más agradezco es esa proximidad y cercanía de la gente. La inmensa mayoría sabe el trabajo que se ha realizado y la transformación y el cambio de ciudad que hemos llegado a hacer.
¿Cómo ha llevado estar en la oposición después de tantos años en el Gobierno de la ciudad?
Lo fácil para mí hubiera sido aquel primer día dejarlo, pero decidí continuar durante un tiempo. Ha sido una situación nueva y también ha sido enriquecedor poder trabajar por la ciudad desde la oposición controlando y fiscalizando con un conocimiento absoluto de todos los expedientes y haciendo aportaciones y trasladando iniciativas y propuestas al Pleno y a las comisiones.
¿Cómo ve el Ayuntamiento tras este primer año de Gobierno socialista?
De un Ayuntamiento dinámico y activo, con proyectos e iniciativas, hemos pasado a una paralización total de la iniciativa municipal. Funciona lo ordinario del día a día, los servicios municipales que coordinan los servicios técnicos, pero desde el punto de vista de proyectos que ilusionen hemos entrado en un encefalograma plano durante estos meses. Ahora se están terminando obras que vienen de la anterior legislatura, pero proyectos nuevos no se ha iniciado ninguno. Es más, no ha habido ni una sola licitación.
¿Cierra esta etapa con candado y tira la llave o se la guarda en el bolsillo por si en un futuro decide regresar?
Por supuesto que se cierra con candado. Ya estuve una vez y volví, pero es evidente que la etapa municipal queda ya cerrada para siempre si bien estaré a disposición de mis compañeros y de quien tenga la representación de la ciudad si en algo puedo ayudar o colaborar. La ciudad está muy por encima de colores políticos.
¿Cuál es la mayor satisfacción de su etapa en el Ayuntamiento?
Son muchas, pero si hay que elegir un momento me quedo con la primera toma de posesión como alcalde de mi ciudad. Aquel día de mediados de junio de 2011 no se olvida. Además, no es lo mismo la primera toma de posesión que la segunda. Y luego, días gratificantes, decenas y decenas, cada vez que pones en marcha una iniciativa, inauguras un proyecto o pones en marcha una obra. Esa sensación de satisfacción interna por el deber cumplido no te la quita nadie; esto es por lo que a algunos nos engancha la política municipal, por tratar de hacer y mejorar cosas de las que se beneficia la gente.
¿Y el peor momento?
La obra de la calle Vitoria; una obra más de las muchas que hemos hecho de cambio, de transformación de Burgos, y que algunos aprovecharon para anteponer su interés político. Que algunos impidieran físicamente a través de la violencia acondicionar esa zona para dar una mayor calidad de vida a los vecinos del entorno fue el momento más delicado con diferencia y, al final, el tiempo da y quita razones. Yo dije que algún día esta obra se hará porque lo pide a gritos y ahora, el alcalde, que entonces fue de los que más rechazaron el proyecto, retoma el proyecto del bulevar, habiendo perdido para disfrute y calidad de vida de la gente diez años, y como les da mucha vergüenza intentan llamarlo de otra forma sabiendo que es exactamente el mismo.
En algún momento estos años, a la hora de tomar decisiones, ¿se ha sentido solo?
No, porque soy una persona que tengo las ideas claras, impulso y ganas para sacar adelante iniciativas, pero que me gusta hablarlo mucho con el equipo.
La elección de Carolina Blasco al frente del Grupo Municipal Popular, ¿estaba clara desde el primer momento o se barajaron otros nombres?
Es una sucesión completamente natural. Carolina es una persona brillante desde el punto de vista intelectual, como gran catedrática que es, y luego es una persona con una oratoria privilegiada, una gran experiencia y capacidad de gestión y liderazgo.
¿Cómo cree que evolucionará la relación PSOE-Cs tras ese primer acuerdo para sacar adelante el Presupuesto de 2020?
Pues depende de si usted me lo pregunta el lunes o el jueves. Dependiendo de cada día de la semana, Ciudadanos es diferente. El lunes posiblemente sean íntimos con el equipo de Gobierno, con el alcalde De la Rosa, y el miércoles o el jueves, posiblemente estén a torta limpia tirándose los trastos a la cabeza. En el caso de Cs, son unos auténticos veletas. Que el portavoz Vicente Marañón cada día de la semana diga una cosa diferente no contribuye a dar estabilidad a la institución. Han hecho este acuerdo por conveniencia y completamente artificial que no aporta nada simplemente para decir que hemos aprobado un presupuesto. No vale para nada, no cuadran ingresos y gastos y lo van a tener que modificar en septiembre.
¿A día de hoy ve a Ciudadanos en el equipo de Gobierno local?
Hombre, están entregados, se han convertido en un apéndice del PSOE. Marañón es el chico de los recados de De la Rosa, con lo cual entre ser un apéndice y decir a todo ‘sí, bwana’ y entrar a gobernar, hay un paso. No sé si entrarán o no, pero lo que tengo muy claro es que si entran, eso no va durar la legislatura. Es materialmente imposible con los cambios de criterios y con esos volantazos que dan día sí y día también. Es imposible que eso dure la legislatura. ¿Entrar formalmente en el Gobierno?, puede ser, pero no va a aportar nada a los burgaleses, porque un mes antes o después saltará por los aires, sin ningún tipo de duda.